Ya van cincuenta y seis años desde que nuestra asociación APADIS Bahía de Algeciras comenzara su labor de mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad intelectual y la de sus familias. Nuestra sociedad ha experimentado cambios muy profundos desde aquel año 1967, en el que un grupo de padres y madres emprendieron lo que para entonces era un complejo reto lleno de obstáculos: conseguir la inclusión social y laboral de sus hijos con discapacidad intelectual. Como presidenta de esta asociación, no hay mayor orgullo para mí que el de saber que, dentro de esta vorágine de cambios que nuestra sociedad ha experimentado, en APADIS Bahía de Algeciras ha perdurado nuestra esencia a lo largo de este más de medio siglo: nuestro carácter emprendedor y transformador. Buena prueba de ello es la amplia cartera de servicios con la que contamos en la actualidad, la cual ha sido fruto del crecimiento y evolución a lo largo de los años para dar así una satisfactoria respuesta a las necesidades de las personas a las que atendemos.

Nuestra asociación es la más longeva de la comarca del Campo de Gibraltar pero está más joven que nunca. Cuando hace un año tomé el relevo a mi antecesora, era plenamente consciente del importante compromiso que estaba adquiriendo, ya no sólo porque soy hermana de una persona con discapacidad intelectual y conozco muy de cerca una realidad con muchas barreras aún por romper, sino también porque era conocedora de que iba a representar a todo un equipo humano que ha sido el pilar fundamental de nuestra labor y trayectoria. Un camino en el que también hemos ido evaluándonos en modelos de calidad con el propósito de continuar mejorando el importante servicio que proporcionamos, así como para fortalecer nuestro posicionamiento en el entorno. El que nuestra entidad haya contado durante tantos años con un liderazgo cimentado en una incansable ilusión, creatividad, carisma e inconformismo, ha sido crucial para colmarnos de seguridad y confianza en cada uno de los pasos que hemos ido dando y que quedan por darse, para seguir así adaptándonos a las nuevas necesidades que se nos presentan.

Mirar al futuro con ilusión, ambición e inconformismo continuará haciéndonos grandes y nos ayudará a no dejar nunca de esforzarnos para seguir progresando en este camino. Pero mirar al futuro nunca debe hacernos dejar de contemplar el pasado, ya que sólo así seguiremos enorgulleciéndonos de las barreras que hemos derribado, y sólo así seguiremos emocionándonos por aquellas personas que ya no están y que fueron esenciales en este recorrido.

Isabel Navarro, Presidenta de APADIS Bahía de Algeciras.